lunes, 7 de abril de 2008

Nieves de marzo


Como sabéis, en Semana Santa nevó en Blacha, y nos hizo disfrutar. Como era inevitable, todos, sobre todo los forasteros, sacamos las cámaras de fotos y nos dedicamos a inmortalizar el momento.
Las imágenes son tópicas y nada más hacerlas ya pensamos que no merecía la pena haber pulsado el disparador, pero no se aguanta uno.
Como dice mi amigo Javi, esto de las fotos requiere reposo y sedimento. Al paso de las fechas, lo que parecía sin valor se va tornando interesante y viceversa -con sus límites, claro-.
Unas semanas después, y una vez que el blanco se ha escapado entre la tierra, las imágenes se dejan mirar de nuevo.
Me gustan tres cosas: la cigüeña soportando la que caía sin apenas inmutarse, la estampa de Blacha, que no debe ser muy diferente a la que contempló don Fabri hace medio siglo o el abuelo Simeón hace cien años, y por último la pobre liebre saltando como siempre, pero más desnuda de lo habitual.
Si quieres ver las fotos, pincha aquí

1 comentario:

Isabel dijo...

Hola amigo blachero. Para que veas que visito tu página y además me encanta ver esas imágenes tan distintas a las que nos ofrece el marzo alicantino y, por supuesto, oriolano.

Yo, como buena mediterránea, espero que en agosto sólo el sol y el calorcito caigan sobre mi cabeza. Estoy segura que disfrutaré mucho en Blacha. Un besazo